Para muchas personas, ahorrar sigue siendo una asignatura pendiente. Hacer un presupuesto familiar, seguir un método de ahorro o controlar los gastos variables puede resultar complicado. Sin embargo, existe una forma sencilla de crear un colchón financiero sin esfuerzo: el preahorro.
En este artículo te explico en qué consiste, cómo implementarlo y qué beneficios tiene para tu salud financiera.
Antes de empezar: otros recursos que te ayudarán a mejorar tus finanzas
Si quieres profundizar en temas relacionados, te recomendamos estos artículos de Ahorradoras:
- Ingresos pasivos: qué son y por qué son nuestros mejores amigos para descubrir cómo generar dinero sin depender solo de tu salario.
- Método de ahorro basado en el redondeo: ahorra sin darte cuenta, uno de los métodos más sencillos para empezar a ahorrar pequeñas cantidades.
- Qué son los gastos hormiga y cómo evitarlos, para identificar esos pequeños gastos diarios que se cuelan en tu presupuesto.
¿Qué es el preahorro?
El preahorro es un método de ahorro automático que consiste en separar una parte de tus ingresos en cuanto los recibes, en lugar de intentar ahorrar lo que te sobra al final del mes.
Preahorrar significa pagarte a ti misma primero: apartar dinero al principio del mes antes de empezar a gastar. De esta manera. eliminas la tentación de gastar ese dinero, porque ya no está en tu cuenta habitual.
La clave del preahorro es automatizar esta transferencia. Puedes programar una transferencia periódica desde la cuenta donde cobras la nómina a otra cuenta de ahorro, preferiblemente sin comisiones. Así, tu fuerza de voluntad no interviene; basta con dar la orden una vez para que el ahorro se repita cada mes.
El preahorro es como configurar un riego automático en un jardín: una vez que ajustas el temporizador, el agua fluye sin que tengas que pensar en ello cada día.
Cómo poner en marcha el preahorro: guía paso a paso
1. Calcula cuánto puedes ahorrar
Haz un pequeño presupuesto: anota todos tus ingresos y resta tus gastos esenciales (vivienda, suministros, comida, transporte). La cantidad resultante es tu capacidad de ahorro. Si no tienes un presupuesto detallado, empieza con un porcentaje pequeño, como el 5 % de tus ingresos y ajústalo más adelante.
2. Abre una cuenta de ahorro separada
El dinero del preahorro debe estar fuera de tu cuenta corriente para no tentarte a gastarlo. Abre una cuenta de ahorro sin comisiones o un depósito cancelable. Si ya tienes un fondo de emergencia, utiliza esa misma cuenta para ir engrosándolo solo si te da rentabilidad. Si no, plantéate ponerlo a trabajar con productos financieros que se adapten a tu capacidad de riesgo y los objetivos que tengas.
3. Programa la transferencia automática
Da una orden a tu banco para que, cada vez que se ingrese tu sueldo (o tus ingresos pasivos), transfiera automáticamente la cantidad que hayas decidido a la cuenta de ahorro. Así no dependerás de recordar hacerlo cada mes y tu preahorro se convertirá en un hábito.
Indica a tu banco que, al recibir tu salario (o ingresos pasivos), realice de forma automática la transferencia de la suma que hayas determinado hacia tu cuenta de ahorros. De esta manera, no tendrás que recordar hacerlo mensualmente y el hábito de ahorrar estará asegurado. Automatizar transferencias suele ser gratis en la mayoría de bancos. Por cierto, echa un vistazo a las cuentas remuneradas.
4. Ajusta tus gastos al nuevo escenario
Una vez apartado el dinero, adapta tus gastos mensuales a la cantidad que queda en tu cuenta corriente. Al principio puede parecerte un reto, pero en pocas semanas tu cerebro se acostumbra a vivir con “menos” y tu ahorro crecerá sin esfuerzo.
Beneficios del preahorro
- No requiere fuerza de voluntad: al automatizar la transferencia, eliminas la necesidad de decidir cada mes cuánto ahorrar.
- Funciona para todos los niveles de ingresos: puedes empezar con 10 € mensuales y aumentar cuando te sientas cómoda.
- Te ayuda a construir un fondo de emergencia rápidamente, lo que te da seguridad ante imprevistos.
- Te obliga a vivir por debajo de tus posibilidades, porque ajustas tus gastos a los ingresos disponibles después de ahorrar.
- Es compatible con la inversión: una vez tengas tu colchón, podrás destinar parte del preahorro a inversiones seguras y así hacer crecer tu dinero.
Consejos extra para que el preahorro sea un éxito
- Evita las deudas caras: intenta no acumular deuda salvo la hipoteca. Si tienes tarjetas o préstamos, aplica métodos como la “bola de nieve” para eliminarlos.
- Controla los gastos hormiga: esos pequeños gastos diarios que parecen insignificantes pueden sabotear tu ahorro. Aprende a identificarlos en nuestro artículo sobre gastos hormiga.
- Complementa con otros métodos de ahorro: el preahorro puede convivir con retos como el método del redondeo o el reto de las 52 semanas.
- Invierte en tu educación financiera: la libertad financiera se construye con conocimiento. Explora conceptos como ingresos pasivos y aprende a salir de la carrera de la rata con nuestros recursos.
Un camino hacia tu libertad financiera
El preahorro es una técnica sencilla pero poderosa que cambia tu relación con el dinero. Al pagarte a ti misma primero, construyes un colchón que te aporta seguridad y te acerca a la independencia financiera. Solo necesitas dar el primer paso: calcular tu capacidad de ahorro y programar esa transferencia automática. Después, deja que el tiempo y la constancia hagan su trabajo.
Recuerda que en Ahorradoras te acompañamos en cada etapa. Además de nuestros artículos sobre ingresos pasivos, métodos de ahorro y gastos hormiga, encontrarás guías prácticas, cursos y una comunidad que te apoya.
El mejor momento para empezar es ahora. Tu yo del futuro te lo agradecerá.
1 comentario
4 mayo, 2019
M LUA
ESTUPENDO ESTA BLOG,GRACIAS MAPI POR COMPARTIR TANTAS IDEAS ........A MI ME ENCANTAN LAS MUESTRAS GRATIS,PRUEBAS PRODUCTOS QUE DE OTRA MANERA NO LO HARIA,POR QUE MUCHOS O SON MUY CAROS Y NO SABES SI MERECE LA PENA Y OTROS POR QUE NO SABES NI QUE EXISTEN...........