Reducir
Consumir menos productos de un sólo uso ya que generan muchos residuos, esto se traduce en una reducción significativa del gasto.
Reutilizar
Intenta darle todas los usos posibles a los objetos que tengas en casa antes de deshacerte de ellos o incluso de reciclarlos. Recuerda que un producto puede tener muchos usos distintos, puedes ver artículos sobre eso AQUÍ.
Reparar
Es importante que antes de tirar algo porque esté roto o estropeado intentes repararlo. A veces es muy sencillo y puedes hacerlo tú misma y otras veces tendrás que acudir a profesionales que entiendan de la materia. Pero así evitarás generar un nuevo residuo y ahorrarás dinero al no tener que reponerlo.
Renovar
Seguro que tienes cosas en casa que has pensado en tirar pero que igual con una mano de pintura o con un «lavado de cara» pueden volver a tener cabida en tu casa o en tu vida. ¿Vas a tirar un sofá porque está desgastado? Prueba a volver a tapizarlo de un color claro o con una tela que encaje en la decoración de tu casa. ¡Te encantará!

Recuperar
Consiste en recoger materiales que ya han sido usados para reintroducirlos en el proceso productivo, en la creación de nuevos productos como materias primas. Puede que esta sea la «R» menos conocida.
Reciclar
Para volver a utilizar los residuos como materias primas es necesario que se separen y se reciclen correctamente. Con este sencillo gesto cuidaremos el medio ambiente y frenaremos el cambio climático. Está en la mano de todos ser consumidores responsables y apostar por la economía circular.