Cazamoscas y mosquitos casero
Con la llegada del verano y del calor, aparece la peor compañía que podemos tener en nuestra propia casa, ese lugar donde se supone que estamos cómodos y protegidos. Los mosquitos siempre hacen acto de presencia para fastidiarnos el sueño o la tranquilidad mientras leemos un libro o vemos la televisión.
¿Qué podemos hacer para acabar con ellos? Obviamente no es la panacea y no conseguiremos acabar con todos, pero sí con un gran número de ellos, e incluso moscas, que también son bastante molestas. Tan solo necesitaremos tantas botellas de plástico de refresco de dos litros como estancias donde queramos que no haya estos molestos inquilinos.
Cortaremos la parte superior de la botella, la invertiremos y la colocaremos de nuevo dentro de la botella. Podemos pegarla con cinta americana o algún pegamento que tenga como base cianoacrilato, pero cuidado con echar demasiado dado que este compuesto es tan fuerte que puede acabar con el plástico. Con unas cuantas gotas será suficiente.
Una vez esté pegado ya solo nos queda poner unos tres centímetros de agua tibia y media taza de azúcar. Esta mezcla hará que tanto moscas como mosquitos se sientan atraídos y entren por el cuello de la botella en busca de comida.
El azúcar al contacto con el agua tibia hará que se convierta en algo ligeramente pegajoso, lo que hará que cuando los insectos se posen sobre el agua no puedan moverse fácilmente, además como la salida es mucho más estrecha que la entrada, les complicará su posible salida, con lo que habremos acabado con ese inquilino indeseable que nos molesta día sí y día también.
Es una idea bastante sencilla que podremos hacer en casa, sin que nos cueste dinero y que resultará algo muy efectivo con lo que ahorrarnos en sprays anti mosquitos o en los productos eléctricos que encontramos en las tiendas.