Opinión: Aceite de argán Taj Sultana.

publicidad

Hoy quiero compartir un descubrimiento que hice gracias a una página web de venta online de alta cosmética natural, Taj Sultana.

Se trata de productos 100% naturales procedentes de Marruecos e inspirados en los rituales de belleza de las mujeres árabes, cuyo ingrediente estrella es el aceite de argán. Hice un pedido hace un par de meses y os voy a hablar de mi experiencia.

Lo primero que me llamó la atención es que el pedido se paga contra reembolso, lo que da mucha tranquilidad, al ser una página relativamente desconocida.

Hace tiempo leí un artículo muy interesante sobre el aceite de Argán y sus beneficios, numerosos estudios lo posicionan como el elixir de la belleza y la juventud, así que fue lo primero que añadí a mi cesta de la compra virtual.


El aceite de Argán ablanda la piel, la hidrata y la protege contra la sequedad y las agresiones externas. Si se aplica de noche, actúa como regenerador y lucha contra el envejecimiento cutáneo. Se utiliza también para aliviar las quemaduras de sol y para algunas enfermedades cutáneas como la psoriasis. Es muy buen hidratante y antiarrugas porque suaviza la piel y le devuelve la elasticidad y el brillo.

El olor del aceite es como a almendra tostada por lo que solo lo he gastado por la noche, justo antes de irme a dormir. No es nada graso y se absorbe casi de inmediato.

Los resultados al día siguiente son espectaculares, una piel súper hidratada. Con el uso continuado, da uniformidad al tono y atenúa imperfecciones. Totalmente recomendable. Su precio es de 14€ en envase de 125 ml con pulverizador.

El siguiente producto que me llamó la atención fue la vaselina de aceite de argán, muy útil para las zonas más resecas de nuestro cuerpo como pies, rodillas o codos. En mi caso, la aplico por las noches en los pies y me pongo unos calcetines de algodón para dormir y al día siguiente es increíble la suavidad que se consigue.

¿ Conocéis Taj Sultana? ¿Y los beneficios del aceite de Argán? Dejad vuestras experiencias 🙂

publicidad